Muchos criadores cubren a sus yeguas entre los
tres y cuatro años, a esa edad también ponen a cubrir a sus sementales. Los
libros de registro de muchas razas dan aptos para reproducción a yeguas y
sementales a partir de los tres años. Tenemos que tener en cuenta que los
potros a partir del año y medio pueden eyacular y que las yeguas a esa misma
edad empiezan a tener sus primeros celos. En manadas salvajes en las bandas
cuando la potra tiene el primer celo su padre la rechaza, eso puede ocurrir
entre el año y medio y los dos años. En la pubertad las potras tienen cambios
hormonales, que se repiten periódicamente, en estos cambios están involucrados
el cerebro, hipófisis, ovarios y tracto reproductivo. Una razón para que no
quede preñada muy joven es porque puede tener problema para producir leche. Alcanzan
la madurez psicológica y fisiológica a la edad de seis años, es una edad
conveniente para que comiencen a criar.
Con más de 15
años, su fertilidad disminuye, necesitándose más ciclos y atención veterinaria
para conseguirlo. En libertad es diferente, pueden seguir criando más años. La yegua ha de estar sana y tener un
buen peso, ni gorda ni delgada y con la posibilidad de ganar peso para aumentar
su fertilidad. Decir que las yeguas primerizas actúan igual que las veteranas
cuando empiezan con el celo y en la primera monta. La primerizas a la hora de
parir se puede asustar y se pone repentinamente de pie y rompe el cordón, sale
mucha sangre de la bolsa amniótica, es la sangre que debería haber pasado al
potro si no se hubiera roto el cordón.
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