Cuando llegamos a
Valverde del Fresno situado en la sierra de Gata, en el Camping “Valverde
Natural” dirigido por Javier www.valverdenatural.com, pudimos observar que una
yegua estaba abocada a parir y pensé que con suerte veríamos al potrillo
nacido.
Dos días antes había
estado la luna completamente llena, la noche del parto estuvo el tiempo muy
revuelto, con mucho viento. En la mañana del 10 de agosto de este año 2017,
temprano, al levantarme, fui a ver a los caballos, ya había nacido, me
sorprendió verla tan espabilada, totalmente limpia, de pie y mamando. He podido
confirmar que muchos animales paren cuando hay luna llena. Esa misma noche
parió a ocho cachorros la perra Mastina que tienen y una señora dijo que
también nació esa noche su sobrina.
Lindando con el
Camping está la finca donde tiene a los caballos, viven felices los cinco, en
libertad, formando manada, todos castaños, hay un macho castrado de 13 años,
que estuvo entero hasta hace 10 meses, lo caparon después de cubrir a la yegua
que ha parido, este caballo aún posee el instinto del semental de protección y
se sitúa arriba, en lo alto, donde puede vigilar, para que no le ocurra nada a
la manada; también hay una yegua con un potro de un mes, esa yegua es hija de
la que acaba de parir a la potrita, protagonista de esta pequeña historia.
El caballo nace
cognitivo, con tan solo seis horas de vida, la potrilla se había metido en un
estanque de agua, su curiosidad la motivo para que experimentara
espontáneamente, con tan poco tiempo de vida, la cantidad de cosas que está
aprendiendo ella sola, sin la intervención del hombre. Se da cuenta de que ahí,
puede beber cuando tiene sed, que puede meterse para refrescarse, que a través
de sus cascos y por la propiocepción sabe si está pisando barro o suelo firme.
Poseen al nacer un instinto que le durara toda su vida. Su madre fuera,
esperándola, no se separa de ella pero la deja actuar libremente, incluso se
revuelca, señal de que no tiene nada de estrés.
El estanque no cubre
mucho y entra agua continuamente, por lo que siempre está limpia, fresca y con
mucho oxigeno. Después de un rato vi como sin dificultades salió del agua y se
puso a mamar tranquilamente. El potro de un mes se junta con la potra y se
olisquean para conocerse, pero a la mamá de la pequeña no le gusta que se
acerque mucho y lo echa solamente con gestos, tampoco deja que se acerque el
padre, interponiéndose entre ambos.
Cuando cumpla los tres meses podrá ser
mucho más independiente. Los caballos que viven en libertad y que en la manada
hay caballos adultos, sementales, caballos jóvenes jugando, yeguas gestantes,
potritos mamando, etc., en ese entorno tienen cantidad de estímulos y aprenden
mucho, cuando tengamos que domesticar y adiestrarlos será mucho más fácil
porque conocen las normas sociales de convivencia. Me apena muchísimo, ver a
yeguas con sus potros recién nacidos en pequeñas cuadras, oscuras, sin
libertad, en las que no pueden aprender nada.
David Muriel Holgado.
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