lunes, 14 de agosto de 2017

EL CABALLO NACE COGNITIVO.



Cuando llegamos a Valverde del Fresno situado en la sierra de Gata, en el Camping “Valverde Natural” dirigido por Javier www.valverdenatural.com, pudimos observar que una yegua estaba abocada a parir y pensé que con suerte veríamos al potrillo nacido.
Dos días antes había estado la luna completamente llena, la noche del parto estuvo el tiempo muy revuelto, con mucho viento. En la mañana del 10 de agosto de este año 2017, temprano, al levantarme, fui a ver a los caballos, ya había nacido, me sorprendió verla tan espabilada, totalmente limpia, de pie y mamando. He podido confirmar que muchos animales paren cuando hay luna llena. Esa misma noche parió a ocho cachorros la perra Mastina que tienen y una señora dijo que también nació esa noche su sobrina.


Lindando con el Camping está la finca donde tiene a los caballos, viven felices los cinco, en libertad, formando manada, todos castaños, hay un macho castrado de 13 años, que estuvo entero hasta hace 10 meses, lo caparon después de cubrir a la yegua que ha parido, este caballo aún posee el instinto del semental de protección y se sitúa arriba, en lo alto, donde puede vigilar, para que no le ocurra nada a la manada; también hay una yegua con un potro de un mes, esa yegua es hija de la que acaba de parir a la potrita, protagonista de esta pequeña historia.
El caballo nace cognitivo, con tan solo seis horas de vida, la potrilla se había metido en un estanque de agua, su curiosidad la motivo para que experimentara espontáneamente, con tan poco tiempo de vida, la cantidad de cosas que está aprendiendo ella sola, sin la intervención del hombre. Se da cuenta de que ahí, puede beber cuando tiene sed, que puede meterse para refrescarse, que a través de sus cascos y por la propiocepción sabe si está pisando barro o suelo firme. Poseen al nacer un instinto que le durara toda su vida. Su madre fuera, esperándola, no se separa de ella pero la deja actuar libremente, incluso se revuelca, señal de que no tiene nada de estrés.


El estanque no cubre mucho y entra agua continuamente, por lo que siempre está limpia, fresca y con mucho oxigeno. Después de un rato vi como sin dificultades salió del agua y se puso a mamar tranquilamente. El potro de un mes se junta con la potra y se olisquean para conocerse, pero a la mamá de la pequeña no le gusta que se acerque mucho y lo echa solamente con gestos, tampoco deja que se acerque el padre, interponiéndose entre ambos. 


Cuando cumpla los tres meses podrá ser mucho más independiente. Los caballos que viven en libertad y que en la manada hay caballos adultos, sementales, caballos jóvenes jugando, yeguas gestantes, potritos mamando, etc., en ese entorno tienen cantidad de estímulos y aprenden mucho, cuando tengamos que domesticar y adiestrarlos será mucho más fácil porque conocen las normas sociales de convivencia. Me apena muchísimo, ver a yeguas con sus potros recién nacidos en pequeñas cuadras, oscuras, sin libertad, en las que no pueden aprender nada.


David Muriel Holgado.